Después de mucho analizar, tomar medidas, y buscar la alfombra perfecta, la encontraste y al fin llegó. La desenrollas y colocas en el lugar en donde soñabas tener, pero las puntas se levantan y está marcada por haber pasado tanto tiempo enrollada. Entonces te desanimas, no se ve como en la foto y te preguntas ¿Y ahora cómo la arreglo?

¡Para eso estamos nosotros, para ayudarte en cada paso con tu alfombra!

Lo primero que debes hacer, es tener paciencia y darle su tiempo, la alfombra lleva mucho tiempo enrollada, por lo que debes dejar que sus hilos y fibras se relajen y acomoden a su nueva estructura.

1º Limpia y desempolva muy bien la superficie en donde colocarás tu nueva alfombra.

2º Desenrolla la alfombra y vuelve a enrollarla, pero hacia en sentido contrario, hacia el otro lado.

3º Estira por completo la alfombra en un lugar en donde pueda estar estirada sin que nada la aplaste y déjala que se acomode unas 24 horas sin tocarla.

4º En caso de que aun así queden zonas rizadas, entonces toma una toalla y humedécela. Cubre una de las esquinas o áreas rizadas con la toalla húmeda, no empapada y pasa la plancha caliente sobre esta varias veces (importante, nunca planchar directamente la alfombra con la plancha ya que esto solo producirá que la alfombra se queme inmediatamente). Repite con el resto de las zonas. ¡Pero ojo, siempre con cuidado, no vayas a quemar la alfombra!

5º Por último, acomoda tu alfombra en la zona en donde irá, y si puedes colocar muebles sobre ella mejor, pero recuerda que la alfombra se debe mover constantemente cuando tenemos muebles sobre ella, ya que de no hacerlo esta quedará marcada.

Con estos simples pasos y un poco de paciencia, podrás tener tu alfombra de ensueño tal como en la foto cuando la compraste. Así que no te desesperes y tendrás los resultados que esperas.